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Una niña de 10 años rompe un récord mundial con los ojos vendados

Punithamalar Rajashekar

Punithamalar Rajashekar, en plena actuación

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Punithamalar Rajashekar, de Malasia, es la más rápida de la historia en colocar las piezas a ciegas

La chica juega todos los días con su padre y es la estrella de su equipo escolar, pero no sabemos si llegará muy lejos. Su pequeña gran proeza, registrada en el libro Guinness, no tienen nada que ver con la calidad del juego. Está federada, aunque todavía no tiene Elo.

En el siguiente vídeo podemos ver en qué consiste su récord, que acaba de establecer: fue capaz de colocar las piezas en la posición inicial con los ojos vendados. Tardó 45 segundos y 72 centésimas, que puede parecer poco o mucho, pero es más rápido de lo que lo había hecho nadie.

Rajashekar lleva jugando al ajedrez la mitad de su vida, lo que en su caso tampoco es tanto tiempo. El reto de poner las piezas sin mirar lo domina de tal manera que ya ha ganado varios premios, como el de mejor niño o niña del año en Asia 2022-2023. También participó en el programa de televisión ‘Kids Got Talent’ de Malasia.

El récord mundial lo logró en su propia escuela, con padres y profesores del colegio como testigos. La idea la tuvo mientras veía un documental sobre logros humanos extraordinarios. «Ver a la gente superar sus límites y lograr hazañas increíbles me inspiró. Me atrajo particularmente la idea de establecer un objetivo personal y empujarme más allá de mis límites. Intentar un récord mundial parecía la manera perfecta de hacerlo», explicó.

Un miembro del jurado comprueba que la niña no puede ver con su antifaz

Como jugadora de ajedrez, el resto estaba cantado. «Mi padre me sugirió que me centrara en mi pasión, así que mi familia y yo decidimos que debería romper este récord en particular», añade la joven plusmarquista.

Cuatro meses entrenando

A la chica no se le puede negar su tesón, ya que además de entrenar se puso a estudiar los vídeos de los anteriores poseedores del récord, para «entender sus técnicas y estrategias». Su preparación, física y mental, duró cuatro meses.

A partir de aquí, es difícil saber el recorrido que tiene su peculiar habilidad, pero que le quiten lo bailado. En realidad, ella quiere ser ingeniera espacial, aunque antes no descarta superar algún otro récord relacionado con el ajedrez a la ciega.

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