Icono del sitio Damas y Reyes

Engaña a todos con un falso cáncer terminal para jugar las WSOP

Rob Mercer

Rob Mercer

Comparte la noticia

Rob Mercer logró participar en el torneo principal de las Series Mundiales de Las Vegas después de recaudar decenas de miles de dólares. «Estuvo mal», reconoce

El póker es un juego de engaño y Rob Mercer ha demostrado que es de los mejores, aunque ya sabemos que no se puede engañar a todo el mundo durante todo el tiempo. El mérito de este jugador de 37 años que viven en Vallejo (California) fue hacer creer a mucha gente que tenía un cáncer terminal de colon. Se aprovechó de la caridad ajena y recaudó entre 30.000 y 50.000 dólares. Además, consiguió alojamiento junto con su padre en una suite del Bellagio. Ahora admite que se inventó casi todo: «Lo que hice estuvo mal». Eso sí, no piensa devolver el dinero.

Mercer pudo pagar así su estancia en la ciudad del vicio (cómo no pecar allí), aunque tampoco duró demasiado en el torneo principal de las WSOP. La inscripción, 10.000 de los grandes, la pagó de sobra con lo recaudado. Ahora reconoce que se inventó la enfermedad, aunque alega que sufre otro cáncer, no diagnosticado, y que al fin y al cabo está enfermo. Es su excusa para no devolver el dinero.

Rob Mercer, de Vallejo, California, ha concedido una entrevista, publicada ayer mismo en ‘Las Vegas Review Journal’, en la que confiesa que no tenía el cáncer que decía cuando abrió una cuenta el pasado mes de junio en GoFundMe. «Mentí sobre tener cáncer de colon. No lo tengo. Lo usé para encubrir mi situación», dice Mercer. «Lo que hice estuvo mal. No debería haberle dicho eso a la gente. Lo hice de forma improvisada, cuando alguien me preguntó qué tipo de cáncer tenía. Siento no haber sido honesto. Si lo hubiera hecho desde el primer día, quién sabe lo que habría pasado». Es fácil imaginar que no habría jugado el torneo, pero Mercer no termina de apearse del todo de su relato.

Recaudación organizada

Entre los donantes que le dieron dinero, no todos anónimos, destaca Cody Daniels, un jugador de Lake Havasu City, Arizona, que sufre una enfermedad crónica y en su día recibió un apoyo similar. Daniels le dio 2.500 dólares. En el Bellagio no han querido confirmar las condiciones en las que lo alojaron y el precio de la habitación. Alegan «razones de privacidad», pero se sabe que el padre de la falsa víctima montó algún numerito y llegó a ser retenido por el servicio de seguridad del hotel.

Daniel Weiman, ganador del torneo principal de las WSOP. Foto: Hayley Hochstetler / WSOP

Desde GoFundMe se han puesto en contacto con Mercer, que ya les ha dicho que no piensa devolver el dinero, porque al fin y al cabo, él sostiene que está enfermo. La organización, pese a todo, se ha puesto en contacto con algunos de los donantes para decirles que piensan devolverles el dinero.

Otro de los timados es el influencer Doug Parscal Jr., que recibió su petición de ayuda a través de las redes sociales y se puso en contacto con varios jugadores conocidos para ayudarlo a toda costa. Uno de ellos, Nick Vertucci, creador y productor del programa de póker ‘Hustler Casino Live’. se ofreció a cubrir la diferencia si Mercer no lograba su objetivo inicial de recaudar 12.000 dólares.

Las dos caras de la noticia

Luego, todos empezaron a sospechar poco a poco ante las explicaciones ambiguas y el comportamiento errático del enfermo imaginario. Algunos empezaron a investigar y acabaron por acorralarlo. Después de las WSOP, el propio Vertucci dijo que se había distanciado de Mercer: «En el fondo, solo pensé: No me gusta este chico», llegó a decir en su programa de YouTube. Tardó un poco, pero al final le funcionó el olfato.

La excusa final de Mercer es que en realidad sufre cáncer de pecho, una enfermedad que le daba vergüenza reconocer y que tampoco ha demostrado. Ahora se queja de que lo vean como a un monstruo, aunque admite que lo puede entender. «Mentí a mucha gente porque tenía miedo de decir la verdad», asegura Mercer, que dice que se pasa 18 horas al día en la cama. «Supongo que tendré que pagar por eso».

Más humano se muestra Vertucci: «No quiero que el chico tenga cáncer. Al final, prefiero que solo sea una mala persona».

Salir de la versión móvil