El indio, de 17 años, aspira a convertirse en el campeón más joven de todos los tiempos. En el torneo femenino, ganó Tan Zhongyi, que retará a la campeona, Ju Wenjun
Hubo varios giros finales de guion en Toronto, claro que sí, en ese thriller apasionante en el que se convirtió el torneo de Candidatos. Gukesh D, de 17 años –habría que recordar su edad en todos los párrafos– los superó todos y ganó la competición de forma merecida. A finales de año se medirá contra el campeón del mundo, Ding Liren, al que acaba de adelantar en la clasificación de la FIDE. Ahora mismo es favorito y amenaza con ser el rey más joven de la historia del ajedrez.
Fue otra jornada histórica, en la que Fabiano Caruana tuvo en su mano empatar con el indio y jugarse con él el título en las partidas rápidas de desempate. Dominó a Ian Nepomniachtchi con enorme solvencia, pero a la hora de rematar, apurado de tiempo, cometió varios errores y se lió. Aquello dio paso a un largo y penoso final, con más de cien jugadas efectuadas sobre el tablero y todavía con opciones para el italoamericano, con variantes imposibles de calcular para los humanos.
Hubo un sinfín de alternativas, que las máquinas anunciaban con frialdad y los comentaristas recibían entre gritos, al menos los españoles. Gran espectáculo el que dieron David Martínez, Pepe Cuenca y Miguel Santos, por cierto. Fabi se acordará toda la vida de la oportunidad perdida, pero millones de aficionados indios compensan su infelicidad con una euforia colectiva incontenible.
En el torneo femenino, se cumplieron los pronósticos y Tan Zhongyi será la retadora de la campeona del mundo, Ju Wenjun. Ha sido la más regular y ha desplegado un juego muy seguro, aunque su compatriota Lei Tingjie y la india Vaishali, empatadas en el segundo puesto, puede que hayan dado más espectáculo.
Repaso a la jornada
La primera partida acabó en cinco minutos. Firouzja y Vidit se van con sensación de fracaso, sobre todo el primero, que acabó penúltimo. Su enfrentamiento final tampoco merece más tiempo de análisis. En casos así, incluso cabría preguntarse si deberían darles el dinero estipulado por cada medio punto.
Pragg, en cambio, siguió jugando y diviritiéndose como el niño que todavía es. Derrotó a Nijat Abasov, que acabó último, y culminó un torneo muy interesante. Animó todas las partidas en las que participó y deja la sensación de que en próximas ediciones del Candidatos podría ser un aspirante temible.
En el duelo decisivo entre Nakamura y Gukesh, el americano planteó un gambito de dama y el indio aceptó el peón. Luego resolvió todos los problemas de apertura con una naturalidad pasmosa., como si fuera fácil. Naka tuvo dificultades incluso para complicar el duelo, mientras que su rival especulaba con un ataque de locura enemigo para forzar la victoria y asegurarse el triunfo en el torneo, pero esto nunca ocurrió. Ni siquiera el reloj ayudaba al número 3 del mundo, incapaz de hacer algo más que alargar la partida, por si el indio sufría un ataque de pánico.
Consejo de Carlsen a Gukesh
En su retransmisión con José Carlos Ibarra, José Gascón destacaba las virtudes de ganador del torneo (17 años, por si alguien lo ha olvidado): «Tiene una psicología de hierro, con actitud de campeón mundial». Entretanto, Magnus Carlsen se unía a la emisión de Chess.com y se confesaba «decepcionado» por algunas jugadas de Nakamura. El noruego contó que Gukesh se encontró con él en Alemania y le pidió algún consejo para el Candidatos. «Le dije que no tenía ninguno, pero que no debería volverse loco. Solo tenía que preocuparse por sus opciones, porque otros jugadores sí enloquecerían». Magnus afirmó también que sentía admiración y sorpresa por el juego desplegado por el indio, «muy divertido de ver».
En efecto, Gukesh no perdió los papeles y jugó con la necesidad de Nakamura de ganar, pero este tampoco se suicidó. ¿Pensaría un poco, aunque fuera en el fondo de su mente, en el daño que le causaría a su compatriota Caruana? Con todo igualado, el indio ganó un peón, pero luego no se atrevió a mantener las damas vivas, la única posibilidad remota de ganar la partida. Naka apretó durante mucho tiempo todavía, pero las tablas estaban cantadas. Gukesh lo dejaba todo en manos de Fabiano y Nepo.
Candidatos femenino
En el torneo femenino, la vencedora estaba cantada, salvo catástrofe para Tan Zhongyi. La jugadora china fue la primera en terminar, con unas tablas que sentenciaban el torneo. Su rival, Anna Muzychuk, nunca tuvo opciones de causar un terremoto. De hecho, Tan tuvo ventaja, pero vio una línea de tablas y se lanzó a por su presa, medio punto de oro que le daba el título y el derecho a retar a Ju Wenjun.
Por si fuera poco, Lei Tinjie no tuvo una jornada fácil y acabó perdiendo contra Humpy Koneru. El resultado ya daba igual, pero da una idea de lo lejos que estuvo de proclamarse vencedora.
En las otras partidas, Vaishali prosiguió con su increíble racha de victorias, esta vez a costa de la rusa Kateryna Lagno. La jugadora india terminó empatada en el segundo puesto, después de ganar las últimas cinco partidas del torneo. De no haber atravesado una fase negativa antes, quizá habría podido pelear incluso por la victoria. Un brindis por los fabulosos hermanos Rameshbabu y por su madre, una de las heroínas de Toronto.
Goryachkina, por su parte, empató contra Salimova. No se jugaban nada, pero fueron profesionales y lucharon.
Qué pena que termine el torneo, pero qué bien que se haya premiado a un jugador como Gukesh. El cambio de generación ha empezado en Toronto.
La imagen de arriba es de Maria Emelianova
Antes de marcharte, te quiero pedir un favor