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El nuevo campeón del mundo, Gukesh Dommaraju, se abrió a los periodistas y al público nada más ganar el título de campeón del mundo. Recordemos lo más importante de lo que dijo este chico sincero y educado, un ejemplo en muchos sentidos
Gukesh Dommaraju es un ajedrecista excepcional, en todos los sentidos, ademas de un campeón legítimo. En el Mundial que acaba de ganar en Singapur hemos visto a un chico con una madurez asombrosa, para tener 18 años. Incluso el físico desmiente a gritos la edad verdadera del joven indio. Magnus Carlsen era un tipo duro, como Kasparov, y Ding Liren parece una criatura vulnerable. Gukesh habla con la franqueza del chino y demuestra la entereza de sus antecesores.
Veamos cómo es el nuevo campeón a partir de lo que dijo nada más conseguir la corona, en la rueda de prensa conducida por el gran maestro estadounidense Maurice Ashley. Escuchar a una persona es una buena forma de conocerla, más aún si, como parece, esta es sincera.
—En realidad, cuando Ding movió la torre a f2 no me di cuenta de que ganaba. Estuve a punto de mover la mía a b3, pero entonces vi que si las cambiaba, su alfil se quedaba atrapado y que en el final de peones simplemente estaba ganando. Me di cuenta de que probablemente era el mejor momento de mi vida.
—Todos sabemos quién es Ding, uno de los mejores jugadores del mundo. He visto cuánta presión tuvo que soportar y cómo ha peleado en este duelo. Eso demuestra lo gran campeón que es. No importa lo que hayan dicho de él. En los últimos dos años no ha estado en su mejor forma, pero vino aquí y luchó en todas las partidas como un verdadero campeón. Lo siento mucho por Ding y por su equipo. Esto no habría sido igual sin él.
—Desde que comencé a jugar con seis o siete años he soñado con esto. Han sido más de diez años con el mismo sueño. Todos los ajedrecistas quieren experimentar este momento y muy pocos tienen la oportunidad, así que lo primero que quiero hacer es dar las gracias a Dios. Todos estos milagros solo eran posibles gracias a Dios. Hubo varios. También estoy muy agradecido a todas las personas que han estado a mi lado en este viaje.
—Estoy aquí representando a mi país. El título le fue arrebatado a la India. En el Campeonato del Mundo de 2013, yo estaba entre el público, miraba al otro lado del cristal y pensé que sería genial estar dentro algún día. Cuando Magnus ganó a Anand, me dije: quiero ser quien devuelva el título a la India. Este sueño ha sido lo más importante en mi vida. Lo he hecho por mí, por mis seres queridos y por mi país. No hay nada mejor que esto.
—El récord de campeón más joven significa mucho, porque cuando tenía ocho años dejé de prestar demasiada atención a los otros chicos. El famoso vídeo que hice en 2017 en el que decía que quería ser el campeón más joven ahora es una realidad. Creo que ese niño de ocho años estaría muy feliz.
—La mejor experiencia de este Mundial fue cuando entré en la sala de juego el primer día. No me fue muy bien, pero ya estaba al otro lado del cristal.
—En la última partida me emocioné mucho porque no esperaba ganar en esa posición. Presioné todo lo que pude, pero pensé que jugaríamos durante cinco o seis horas para terminar en empate y que debía centrarme en los desempates. De repente, todo terminó y había logrado mi sueño. No suelo mostrar demasiadas emociones, pero creo que esto se me puede perdonar.
—No cambiaría nada de mi carrera, porque ahora mismo estoy aquí. Mi consejo a los jóvenes es que sigan disfrutando del ajedrez, porque algún día lograrán sus sueños.
—Me gustaría agradecer a mis padres todo lo que han hecho. Ambos son amantes de los deportes y en su juventud no tuvieron la oportunidad de perseguir su pasión. Cuando yo nací, decidieron que me ayudarían en cualquier cosa de todas las formas posibles. Cuando comencé a mostrar interés en el ajedrez y mostré algo de talento, llegaron a tales extremos que no lo entendí en su momento. Ahora miro hacia atrás y simplemente están locos. No puedo agradecerles lo suficiente. Ambos han sido el mayor apoyo en todo mi viaje. Esto no es solo para mí, también es para ellos. Los amo.
—Con Paddy Upton empecé a trabajar alrededor de mayo, con la ayuda de uno de mis patrocinadores. Un buen estado mental es muy importante. Ha sido agradable e instructivo. Tuvimos muchas conversaciones en estos meses. Discutimos sobre cosas importantes, como la incertidumbre y el enfoque que debía adoptar. Paddy no sabe mucho de ajedrez, pero entiende el deporte y la psicología, no solo la parte mental. También me ayudó a planificar algunos entrenamientos para mantenerme en forma físicamente. Compartíamos pensamientos. Él sugeriría algunas cosas. Paddy ayudó al cricket indio a ganar la Copa del Mundo de 2011 y ahora ha ayudado al ajedrez indio, 13 años después. Muchos deportistas trabajan con entrenadores mentales, pero en el ajedrez de alguna manera no es tan popular, aunque es un deporte muy mental. Creo que el lado psicológico del ajedrez crecerá en los próximos años.
—Toda mi estrategia era presionar lo máximo posible en cada partida, con ambos colores, y no funcionó hasta el último momento, pero solo se necesita una partida para que la estrategia dé sus frutos, así que tenía confianza en mi enfoque. Podría decir que fue una buena estrategia.
—El desafío más difícil fue recuperarme tras perder la primera partida. Sabía que podía suceder y estaba preparado, pero llegas aquí con 18 años, pierdes el primer día y es un poco humillante, así que fue difícil manejarlo. Pero después tuve un momento agradable. De regreso al hotel, en el ascensor vi a Vishy Anand, que me dijo que él solo tuvo once partidas para remontar y que yo tenía trece. Fue un buen recordatorio de que era solo una partida y que tendría mis oportunidades. Necesitaba algo de fortaleza mental en ese momento. Luego, perdí varias oportunidades, lo cual también fue frustrante. Fue difícil, pero al final funcionó.
—En mi carrera no puedo decir que haya hecho grandes sacrificios, porque era algo que siempre quise hacer. La mayoría de los sacrificios los han hecho mis padres y mis amigos. No éramos una familia acomodada, aunque yo no me daba cuenta en ese momento. En 2017-2018 nos estábamos quedando sin dinero y mis amigos se acercaron y me patrocinaron para que pudiera jugar torneos. Mis padres tuvieron que cambiar su estilo de vida solo para darme una oportunidad. Los mayores sacrificios los hicieron ellos y los miembros de mi equipo, que también son padres de niños pequeños y no ha sido nada fácil hacer una preparación tan intensa.
—Cada vez que me siento deprimido, pienso en la gente que me rodea y en lo que hacen por mí. Toda la energía que necesito la obtengo de mis seres queridos y de Dios. Tengo fe en Dios y él me ha ayudado de muchas maneras.
—Cuando comencé a jugar al ajedrez, en muchas fases me sentía estancado, frustrado. Los resultados no llegaban. Pero la mayor parte de mi carrera he sido bastante disciplinado y he hecho las cosas correctas. He trabajado duro, concentrado. Siempre he pensado que cuando haces lo correcto, incluso cuando los resultados no aparecen, en algún momento llegarán, sucederán cosas buenas. Creo en eso.
—Esto siempre ha sido solo una parte del sueño, una parte muy, muy grande. Es un paso enorme, pero mi objetivo siempre ha sido estar en la cima el mayor tiempo posible. Mi carrera acaba de comenzar. Quiero jugar todo el tiempo que pueda, tener una carrera muy, muy larga y permanecer en lo más alto. Obviamente, convertirme en campeón del mundo no significa que sea el mejor. Está Magnus, que es un factor motivador para seguir haciendo las cosas correctas y trabajar duro. Quiero alcanzar su nivel de grandeza.
—Lo más importante que aprendí de Ding Liren es que es un luchador increíble. Parecía que estaba perdido y seguía encontrando recursos. Cuando perdí la partida número 12, estaba decepcionado, pero me inspiré en él. Cuando tomé la delantera, cualquier ser humano normal habría renunciado en ese momento, pero él vino al día siguiente y jugó una gran partida. Me destruyó por completo. Fue realmente inspirador ver cómo peleaba con todas las probabilidades en su contra.
—Estoy orgulloso de lo consistente que he sido. No por mis resultados, sino por la forma en que vivo y trabajo. Era más fácil cuando era un niño, pero después de convertirme en adolescente el ajedrez no es lo único en tu mente. Estoy orgulloso de cómo pude alejar todas las distracciones y concentrarme completamente.
—Jugar contra Magnus Carlsen en un campeonato mundial sería increíble y un gran desafío, el más difícil que hay en el ajedrez. Depende de él, pero me encantaría medirme contra el mejor del mundo.
—Ganamos la Olimpiada de Ajedrez, que fue una experiencia hermosa para mí y para el equipo. Estoy seguro de que vamos a tener todo unas carreras muy largas y espero que todos sigamos luchando entre nosotros. Seguiremos motivándonos mutuamente y en los torneos por equipos jugaremos y ganaremos muchos más. También me encantaría jugar contra un oponente indio en un campeonato mundial. Son grandes tipos y grandes jugadores. Les deseo lo mejor y espero que esta victoria los motive.
—He sentido que todos los ciudadanos indios están conmigo. Tenía esa energía. India está conmigo, es como si todo el país estuviera conmigo, todos rezan por mí. Todos me apoyan, así que quería hacer esto por ellos.
—Para ser muy honesto, no dormí muy bien durante el campeonato, pero creo que es comprensible. En el día de descanso después de la partida número 12, hablé con Paddy sobre esto. Me sentía un poco atontado en el tablero, así que le pedí algunos consejos y él sugirió pequeños cambios. Configuré el entorno mejor y los últimos dos días dormí muy bien, al menos 8 horas. Me sentí más fresco en el tablero. Dormir es una parte muy importante.
En la imagen de arriba podemos ver a Gukesh con su trofeo como campeón del mundo. Foto: Maria Emelianova / FIDE
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