¿Por qué no se presentó Alireza Firouzja a recoger su medalla?
El francés Alireza Firouzja se ausentó de la entrega de premios organizada por la FIDE en Samarcanda. Algunos critican que no hubiera partidas de desempate en el Gran Suizo.
Carlsen dignifica el Mundial del Ratón
Magnus Carlsen, gana en Arabia Saudí la Copa del Mundo de Esports, un nuevo título para su colección y una competición que nos ofrece luces cegadoras, además de algunas sombras.
Mis libros de ajedrez favoritos (12), por Jorge Ramírez
El maestro FIDE mexicano Jorge Ramírez, autor de ‘Los secretos del ajedrez’ y de ‘El supermanual de ajedrez’, recomienda un título clásico y otro moderno.
¿Es justo que Magnus Carlsen sea el número uno?
Jacob Aagaard cree que esto solo es posible por los defectos del sistema Elo y que es injusto que Carlsen siga en lo más alto de la lista de la FIDE sin jugar apenas ajedrez clásico.
Mis libros de ajedrez favoritos (1), por Daniel Pulvett
Para celebrar el Día del Libro y por iniciativa de Yago Gallach, iniciamos una serie sobre los títulos preferidos por los ajedrecistas. Pulvett, ajedrecista ciego, nos da una lección de «supervivencia».
La FIDE se prepara para la guerra del Freestyle Chess y amenaza a los jugadores
La Federación Internacional que preside Arkady Dvorkovich tiende una mano mientras sostiene en la otra el mazo judicial.
Vaishali divide a las ajedrecistas al abogar por suprimir el título de gran maestra femenina
La jugadora india asegura que estos reconocimientos pueden «causar una falsa sensación de logro». Su compatriota Vijayalakshmi, primera gran maestra india, responde: «Merecemos respeto, no que nos borren»
Una FIDE translúcida
La Federación Internacional (FIDE) escandaliza al mundo por los costes del próximo Campeonato del Mundo de ajedrez. Está previsto que Ding Liren y Gukesh se enfrenten entre el 20 de noviembre y el 15 de diciembre
El dolor más humano
Pocas cosas irrelevantes te destruyen tanto y causan tanto dolor como perder una partida de ajedrez. En el Candidatos hemos visto imágenes de grandes maestros devastados que, salvo en algún caso pintoresco, no pueden culpar a nadie de su derrota