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Otros seis españoles terminaron entre los diez primeros en los campeonatos celebrados en Rumanía, un resultado aceptable pero no brillante
Diego Macías, séptimo en el último Mundial sub 16, logró ayer la medalla de plata en el Campeonato de Europa de la misma categoría, celebrado en la ciudad rumana de Mamaia. El maestro internacional valenciano (rebañó el título en julio, aunque oficialmente todavía figura como maestro FIDE) fue el más destacado de los españoles. En general, la ‘selección’ hizo un buen papel, ya que otros seis jugadores se metieron entre los diez primeros. No obstante, se esperaba más aún de algunos de los nuestros, que partían entre los favoritos.
Macías, por ejemplo, partía como tercer mejor jugador del torneo. El jugador del Club Ajedrez Andreu Paterna superó el reto de mantener las expectativas, más aún después de su excelente actuación en el Mundial. En Rumanía empezó muy fuerte, con cinco puntos en las seis primeras rondas, pero luego perdió contra el polaco Jakub Seemann, a la postre ganador del torneo. Dos victorias en sus dos últimos duelos, cuando se jugaba la medalla, auparon a Macías a la segunda plaza.
En realidad, cinco jugadores terminaron empatados a siete puntos, pero el sistema de desempate favoreció a Seemann, que superó al español por unas pocas décimas. Javier Habans, que también llevaba cinco puntos en la sexta ronda después de encadenar cinco victorias consecutivas, perdió luego las tres últimas y arruinó su clasificación final, peor de lo esperado. También con cinco puntos y por debajo de lo que cabía pensar acabó Xulio del Prado.
Otros españoles destacados
En los Campeonatos de Europa por edades, celebrados del 4 al 15 de septiembre, otros seis ajedrecistas de nuestro país acabaron en el top 10 de sus respectivas categorías. Hugo Pérez fue séptimo sub 8, Laia Cid acabó octava en el mismo grupo de edad, Pau Marín terminó octavo sub 12, Daniel Tabuenca fue sexto sub 14, Helena Joana logró la décima plaza en la misma categoría y Álex Garrido logró la novena sub 18.
Marín, que parecía otra opción a medalla, empezó con 5,5 puntos en las primeras seis partidas del torneo sub 12, pero luego solo consiguió unas tablas. El punto de inflexión llegó con sus derrotas contra el azerí Khagan Ahmad y el rumano Henry Edward Tudor (de nombre algo pretencioso aunque seguro que buen chaval). Su pequeño consuelo es que sus verdugos terminaron primero y segundo, respectivamente.
En la prueba sub 14, Tabuenca era el segundo favorito del torneo, de acuerdo a su Elo. Pese a su derrota inicial, luego ganó cinco partidas seguidas, bien colocado ante la recta final, en la que volvió a tropezar contra el sorprendente ganador, Rustam Rustanov, al menos si nos guiamos por su puntuación. El azerí firmó 8 puntos de 9 posibles, sin ninguna derrota. Tenía 1995 puntos Elo y su actuación fue de 2545. Subió de golpe 234 y seguro que sigue mejorando.
Según relataba Michael Rahal, a Rumanía se desplazaron 22 ajedrecistas, siete miembros del equipo técnico y padres y tutores, que mantuvieron un ambiente excelente. Las dos salas de juego estaban situadas en un destino turístico de playa, entre el mar Negro y el lago Siutghiol. La jefa de la delegación era María Rodrigo.