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Benjamin Lee y Wesley Fei dejan aparte sus diferencias para destapar al timador que los extorsionó

Dos jugadores habituales del programa ‘Hustler Casino Live’, que cumplió en agosto dos años, han denunciado la sofisticada extorsión sufrida a manos de un estafador que aprovechó la conocida animadversión entre ambos. PokerNews informa de la historia, cuyas supuestas víctimas son Benjamin Lee (‘Blank Check Ben‘)y Wesley Fei (‘Wes Side’), enemigos declarados.

Hace poco conocimos el caso de Bob Mercer, que se inventó un cáncer terminal para conseguir fondos. Ben Lee ha contado con todo detalle, en una entrada de su blog, el mecanismo con el que perdió casi 35.000 euros. El cebo fue una página web en la que una persona anónima acusaba a Wesley Fei de haberle estafado 250.000 dólares con un negocio de criptomonedas y de haber enviado matones a su casa para acallar las denuncias.

Es cierto que Fei (@CryptoApprenti1) ofrece servicios financieros. Su llegada al mundo del póker ha sido reciente, pero ya es toda una estrella del citado programa, por su heterodoxo estilo (acaba de aprender a jugar) y por la profundidad de sus fondos, procedentes del mundo cripto, que dejó cuando perdió de golpe 20 millones de dólares. Un atractivo añadido de Fei es que en el póker ha alternado grandes pérdidas con ganancias sorprendentes.

El siguiente paso del denunciante misterioso fue ponerse en contacto con Lee para pedirle ayuda: necesitaba dinero para desenmascarar públicamente a Fei. Al principio se negó, pero el presunto estafador era muy hábil y logró enviar mensajes y fragmentos de audio manipulados que hicieron pensar a lee que todo era cierto. Al final, acabó picando.

«Le proporcioné financiación y asistencia porque creía sinceramente que era una víctima inocente a la que habían quitado los ahorros de toda la vida», admite Lee, quien también reconoce que él fue la más tonta de las dos víctimas: «Descubrí que es un estafador profesional que ha intentado defraudar y extorsionar tanto a Wesley como a mí. Sus intentos de extorsión no funcionaron con Wesley, pero desafortunadamente sí lo hicieron conmigo».

Disculpas por la estafa

El relato de los hechos, que comienzan el pasado mes de junio, es tan largo que Benjamin Lee lo cuenta aparte, de forma detallada, pero antes concluye que fue manipulado aprovechando su «simpatía y fuerte odio por la injusticia», además de su «aversión personal por Wesley». «Ya me he disculpado dos veces con Wesley. Su reputación ha sufrido porque yo fui lo suficientemente crédulo como para ser manipulado por un estafador. Ahora reitero mis disculpas en público. Acepto la plena responsabilidad por mis errores. Debería haberlo hecho mejor».

«En el momento de escribir este artículo, el estafador sigue extorsionándonos a los dos», añade Lee, antes de pasar al relato pormenorizado de todo lo ocurrido. También aporta la identidad del presunto timador y publica sus fotografías. En el texto reconoce que gracias a los audios manipulados llegó a creer que la vida del estado y la suya propia estaban en peligro, y que la única manera de parar las amenazas era conseguir la detención e incluso la deportación de Fei.

Lee descubrió tarde que a Fei también lo estaban extorsionando y le pedían 35.000 libras (más de 40.000 euros) con similares argumentos, pero en dirección contraria. El estafador aplicaba a los dos enemigos el mismo sistema. A Fei le contaba que Lee intentaba conseguir su deportación, lo que no dejaba de tener una parte de verdad, pero el jugador de origen oriental asegura que nunca picó. También está convencido de que el timador fue detenido en alguna ocasión por tráfico de drogas.

Se busca

Benjamin Lee acabó contratando a un investigador privado y desenmascarar al estafador, que asegura haberse escondido de los matones de ambos jugadores, ahora que se han unido. Cree que no es británico, como dice, sino que nació en Irak o en Jordania. Quién sabe. En esta página cuenta su supuesta identidad real y cómo actúa. También revela que es un jugador de póker, no demasiado avezado, pero que es un artista de los fotomontajes y la manipulación de audios.

El final de la historia, al menos hasta ahora, es de película. Lee advierte a todo el mundo: «Es un criminal. Ha cometido varios delitos, incluidos tres de fraude y varios más de intento de fraude. También es culpable de dos delitos de extorsión. (…) Sigue siendo una persona muy peligrosa y sin duda podría atacar de nuevo. Estamos haciendo un llamamiento a nuestros amigos en internet (especialmente en el Reino Unido) para que lo vigilen y lo denuncien a la policía tan pronto como tengan información sobre su paradero».