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La India entera y el mundo del ajedrez celebran la victoria del joven de 17 años en el torneo de Candidatos
La felicidad va por países. En Estados Unidos, el intento frustrado de Fabiano Caruana de recordar a sus compatriotas que el ajedrez no fue abolido con la espantada de Bobby Fischer no ha merecido grandes crónicas. He sido incapaz de encontrar una sola noticia reciente sobre el torneo de Candidatos en ‘The New York Times’; no será por recursos. Entretanto, Gukesh D se ha convertido en un ídolo en la lndia y el primer ministro del país, Narendra Modi, ha compartido su felicidad con los casi 100 millones de seguidores que tiene en X. Ramesh, el entrenador más famoso del mundo, confirmó una sospecha: «La India entera está orgullosa de ti».
Como se ve en las imágenes de arriba, al gran maestro de 17 años le costó un rato atravesar los cinco o seis metros que lo separaban de la furgoneta que iba a llevarlo de regreso al hotel. Una pequeña multitud, valga el oxímoron, coreaba su nombre y lo felicitaba por sus éxitos: ‘¡Gukesh, Gukesh, Gukesh!’. Ni un instante de tensión, pese al agobio y la preocupación lógica del responsable de seguridad. Este chico, un ejemplo perfecto de trabajo duro, talento, determinación y sangre fría, todavía no tiene ni detractores o enemigos. Estarán escondidos en alguna cueva, a la espera de que cometa su primer gran error.
El punto de inflexión de Gukesh
De momento, él se encargó de transformar en algo positivo lo que podía haber sido el punto de inflexión negativo de su carrera, antes de la etapa feliz que lo aguarda ahora. Que practique el yoga y recurra a técnicas de relajación es interesante, pero no sorprende demasiado. Dice mucho más sobre su carácter el momento que Gukesh elige para explicar cuándo empezó a pensar que podía ganar el Candidatos. Fue justo después de su única derrota, contra Alireza Firouzja, en la séptima ronda del torneo.
Esa oportunidad perdida, en la que otros se habría recreado llorando, fue un trampolín para el indio: «Estaba bastante triste después —hubo jornada de descanso—, pero durante el resto del día me sentí muy bien. A pesar de que fue una derrota dolorosa, me sentía en mi mejor estado. Perder esa partida me dio mucha motivación. Después de la séptima r¡onda, estaba en mi mejor momento».
Gukesh respira y transmite paz, como un Gandhi competitivo, valga de nuevo la aparente contradicción. «Lo principal fue mantener la mentalidad correcta durante todo el torneo. De principio a fin, estaba de buen humor, totalmente motivado y realmente quería ganar el Candidatos. Todas estas cosas suman. Fue útil estar en forma en ajedrez y me las arreglé para jugar buenas partidas, pero diría que, sobre todo, mi actitud mental en este torneo fue muy, muy buena».
Al otro lado de la felicidad, Caruana confesaba qué pensó al no saber rematar su partida contra Nepo, que le habría permitido jugarse el título en las partidas rápidas de desempate contra indio: «Me sentí como un idiota. Fue una partida muy mala en el momento menos apropiado». Esa no es la actitud, Fabiano, aunque todos nos hemos sentido así más de una vez.
La imagen de arriba es de Michal Walusza
Gukesh hace historia y jugará el Campeonato del Mundo
Antes de marcharte, te quiero pedir un favor
Buen apunte, Vicenç. Muchas gracias por tus comentarios.
Me alegra el resultado de Gukesh. Estuvo muy cerca de ganar Wijk aan Zee 2024. Por apuros de tiempo en la penúltima ronda no evitó las tablas fotográficas que le impidieron afrontar la última ronda con un punto de ventaja.