Divya Deshmukh, fotografiada por Lennart Ootes, en el Tata Steel

Divya Deshmukh denuncia el trato que reciben las jugadoras: «Se habla de todo menos de ajedrez»

Tiempo de lectura aprox: 2 minutos, 13 segundos

La jugadora india escribe una amarga queja sobre el modo superficial en que las ajedrecistas son vistas por la prensa y los aficionados, que no las respetan como a los chicos

He hecho cientos de entrevistas a ajedrecistas y cada vez soy más consciente de la responsabilidad que supone y de lo complicado que puede ser también para la otra persona. La ajedrecista india Divya Deshmukh, de 18 años, número 38 del mundo, ha esperado a terminar su participación en el Tata Steel para criticar en Instagram el modo en que las mujeres son tratadas por aficionados y periodistas e incluso por los padres de otros ajedrecistas. ¿Tiene razón en sus lamentos? Aunque estuviera equivocada por completo, que no lo está, su queja debería hacernos pensar. Llueve sobre mojado.

Divya tiene el título de maestro internacional absoluto y fue una de las sensaciones del torneo Challengers al derrotar a dos grandes maestros, Jaime Santos y Liam Vrolijk. También hizo tablas con Daniel Dardha y con su compatriota Harika Dronavalli, gran maestro absoluto como los otros jugadores citados. Aunque la puntuación de Divya no llegó al 50%, su resultado fue positivo. Lo suyo no es por tanto una pataleta por un mal resultado cuando dice que en Wijk haz Zee se habló de todo, de su ropa, de su acento y de «cualquier cosa irrelevante», pero no de sus partidas. «Muy pocas personas prestaron atención a mi juego y es algo bastante triste».


Publicidad VIII Open Semana Santa Alicante

«Estaba bastante molesta al escuchar esto. Creo que cuando las mujeres juegan al ajedrez, la triste verdad es que a menudo pasan por alto lo buenas que son en realidad, sus partidas y su fuerza. Me decepcionó bastante ver que en mis entrevistas la gente lo discute todo, excepto mis partidas. Siento que es injusto».

Otra imagen de Divya Deshmukh en Wijk paz Zee, fotografiada por Lennart Ootes
Otra imagen de Divya Deshmukh en Wijk paz Zee, fotografiada por Lennart Ootes

Según la ajedrecista india, en las entrevistas que les hacen a los chicos, hay muchas menos preguntas personales y sobre asuntos irrelevantes. «Las mujeres se enfrentan a esto a diario. Apenas tengo 18 años y me he enfrentado a muchos juicios, incluido el odio, por cosas que ni siquiera importan. Las mujeres deberíamos empezar a recibir el mismo respeto».

Divya: «Ha superado todos los límites de la tolerancia»

Divya también le dijo a la periodista Susan Ninan en ‘Hindustan Times’ que todo esto le ha estado ocurriendo de forma continuada en los últimos cinco años. «El punto de inflexión para mí fueron los comentarios de YouTube. Si lo miras desde la distancia, puede no parecer nada, me ha estado sucediendo repetidamente durante los últimos cinco años. No me gusta prestar atención a esas cosas, pero a veces es demasiado y cruza todos los límites de la tolerancia».

La ajedrecista también le dijo a Ninan algo que ha contado Susan Polgar muchas veces, que a menudo pensaba ir vestida deliberadamente para no llamar la atención: «Pero luego pensé: ¿por qué debería cambiar mi aspecto o cambiar mi estilo por algunos comentarios asquerosos? No creo que deba darles ese tipo de poder o control sobre mí».

Mal perder de los chicos

Los otros jugadores no son inocentes. No todos, como mínimo: «Muchos chicos pillaban rabietas cuando perdían contra mí, solo porque soy una chica», asegura a ‘Hindustan Times’. «Siento que los chicos tienden a subestimar a las chicas y no pueden soportar perder o incluso hacer tablas contra nosotras. Por supuesto, no son todos, pero sí la mayoría de los que he visto».

No hará falta decir que después de sus palabras, Divya ha recibido innumerables críticas, pero también el apoyo de otras ajedrecistas, como Jennifer Shahade y Sara Khadem. Alguna, como Elisabeth Paehtz, le recomienda que lo ignore como ha hecho ella, porque así su carrera sería más fácil. «Todo el mundo me dice que lo ignore y que me centre en mis partidas. Así lo hago y les bloqueo, ¡pero eso no significa que tenga que quedarme callada!».

Otros artículos sobre sexismo y ajedrez


Antes de marcharte, te quiero pedir un favor

Únete gratis a Damas y Reyes

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Scroll al inicio