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Después de casi cuatro horas de «durísimas» negociaciones, sigue adelante el ‘Clash of Claims’, con importantes modificaciones. Se jugarán menos partidas y se anulan algunos resultados, por el fallo del reloj en las partidas en Chess.com
La mañana que han vivido David Martínez y el resto de organizadores del ‘Clash of Claims’ no se la deseo a nadie. Empecemos por contar cómo se ha salvado el duelo y luego explicamos la intrahistoria. Han sido cuatro horas de negociaciones durísimas con Vladimir Kramnik. El ruso se negaba a jugar más en Chess.com y para ello se agarraba a un punto en el que tenía razón: un fallo técnico impidió que las condiciones fueran iguales para los dos jugadores en las partidas celebradas a través de la plataforma.
Por suerte, fue mucho más fácil el trato con José Martínez, quien ya es el ganador moral del enfrentamiento, pase lo que pase. Nunca ha puesto problemas, incluso cuando las condiciones perjudicaban sus opciones de victoria. Ayer mismo me comentaba con pena: «Está claro que algo rato tenía que pasar en este ‘match’».
Al final, este sábado solo se jugarán cuatro partidas, todas ellas sobre el tablero. Por tanto, se cancelan las partidas online para la segunda jornada, que empezará a las siete de la tarde, en parte porque las negociaciones también han dejado exhausto a Kramnik.
Mañana, en cambio, se disputarán 14 partidas más, todas ellas a través del ordenador y de la plataforma Chess.com, en la que Kramnik se negaba a jugar. Se ha comprobado el origen del error y se le ha puesto remedio. Ya no se hará el numerito de abrir los ordenadores delante de los jugadores, que como causa indirecta también ha contribuido al fallo, aparte del error ya conocido en la plataforma, que «pasa una vez entre un millón», aseguran, pero con una puntería inoportuna.
Resultado anulado y menos partidas
Por otro lado, se ha comprobado que el problema ocurrió en todas las partidas por internet. Aunque Kramnik no perdió por ese motivo, se admite su reclamación y se anula el resultado de su derrota en la primera partida online. Debido a eso, Kramnik ahora mismo tiene dos puntos de ventaja en el marcador.
Si el lector hace las cuentas, verá que al final solo se jugarán 28 partidas, en lugar de las 36 previstas. Y repito el cambio de horarios: hoy se jugará a partir de las siete de la tarde y mañana se recupera el horario de las cinco.
Crónica de la primera jornada
Lo cierto es que el público asistió ayer a seis partidas vibrantes sobre el tablero y el drama esperó a que empezaran a jugar por internet, espalda con espalda. Entre los asistentes a las instalaciones del Casino Gran Vía, donde había muy buen ambiente, no faltaba algún importante guionista y productor de cine, por si hay que contar lo ocurrido en la gran pantalla. Todo iba sobre ruedas, con alternativas en el marcador, hasta que se produjo un incidente en el segundo juego por internet, que puso en peligro la continuidad del ‘Clash of Claims’ o ‘Duelo de las reclamaciones’. Quizá el nombre tentó al diablo, pero la vieja pelea entre el gran maestro ruso y Chess.com tampoco ayuda demasiado.
Vladimir se negó a seguir jugando entonces las partidas de ordenador en la misma plataforma después del fallo técnico, muy inusual pero ya conocido, que hizo que el reloj de su pantalla no funcionara bien. Ocurrió que el excampeón del mundo pensaba que le quedaban solo unos pocos segundos, lo que le obligaba a jugar rápido, cuando en realidad tenía más de medio minuto a su disposición.
Una vez descubierto el fallo, que los árbitros y el experto antitrampas del torneo pudieron demostrar, Kramnik se agarró a esa circunstancia para parar el duelo, al menos si se seguía en Chess.com. Después del consiguiente caos, David Martínez propuso a los jugadores seguir jugando sobre el tablero las cuatro partidas restantes, para salvar la jornada. Ya se recuperarían después las partidas en internet. Los dos aceptaron, pero luego el Divis ha tenido que demostrar todo su talento como negociador para salvar el ‘match ball’.
En la mañana de este sábado, los organizadores se han reunido durante casi cuatro horas con Kramnik, enrocado en una posición difícil de desarmar. Le asiste la razón en cuanto a la existencia del fallo, pero sin las rencillas pasadas con Chess.com no se habría vivido esta incertidumbre. «Todo fue bien en las partidas sobre el tablero, las condiciones de juego son perfectas, pero online sucedió algo muy extraño», explicó Kramnik en un vídeo que publicó poco después. En su charla con los organizadores, nada más producirse el problema, ya había soltado una frase que se convirtió en su principal argumento: «No puedo confiar más en la plataforma».
Qué opinan los jugadores
En medio de toda la incertidumbre y el caos que se generó, con el público expectante, pude hablar con los dos grandes maestros y conocer de primera mano sus intenciones, aunque las de Kramnik son más conocidas gracias a su vídeo, sobre el que volveremos unos párrafos más abajo.
En el caso de José Martínez, su comportamiento y su actitud han sido ejemplares hasta ahora. Solo quiere jugar y demostrar que es capaz de hacerlo al mayor nivel, en partidas rápidas, para que nadie lo pueda acusar de hacer trampas. Lo decía en la entrevista de ayer en Damas y Reyes y lo ha repetido después.
Pregunté a Martínez si estaría dispuesto jugar el resto de las partidas sobre el tablero, si no se podía seguir en internet, y admitió que lo haría, aunque no le haría ninguna gracia porque a él le favorecen las partidas en 2D y su rival es más fuerte en 3D. Jospem ya hizo una concesión importante al aceptar que las partidas se jugaran al ritmo de 3+2, pese a que el ritmo elegido no parece el más adecuado, ya que todo esto empezó por la polémica surgida en los Titled Tuesday de los martes, que se disputan a 3+1.
Martínez ha venido a Madrid con una ganas enormes de demostrar su valía y lo único que lamenta es el número de errores cometido en las primeras partidas, que le han impedido ir por delante en el marcador. Ahora lo tendrá aún más difícil, al anularse una de sus victorias. Por otro lado, el gran maestro hispano ha comprobado que el nivel de juego de su rival ha ido subiendo partida a partida. Asegura que Kramnik ha preparado muy bien las aperturas y ha visto la misión de derrotarlo era aún más difícil de lo que esperaba.
Por qué no se juega en otra plataforma
Dado que Chess.com se quiso mantener al margen de la organización, algunos se preguntan por qué no se juega en Lichess o algún otro servidor. El principal problema son las retransmisiones. Levy Rozman (Gotham Chess) por un lado y El Divis y Pepe Cuenca por el otro trabajan para Chess.com y no pueden o no deben permitirse ese cambio, por no hablar de las consideraciones técnicas de cambiarlo todo sobre la marcha.
Por otro lado, y aunque esto no debería afectar, en Madrid hay un equipo de Chess.com desplazado para grabar un segundo documental, después del que le hicieron a José Martínez en Puebla. Sus cámaras están en todas partes, siempre atentas a todo lo que ocurre, y tengo verdadera curiosidad por saber cómo contarán este duelo. Y temor a salir demasiado en sus imágenes.
Enroque de Kramnik
Y volvamos a la posición de Kramnik. En las redes sociales resumió su postura, que al final no ha sido tan inamovible: «Espero que podamos continuar el duelo en cualquier plataforma que pueda proporcionar condiciones de juego aceptables, sin demoras ni fallos. Me gustaría preguntar a otras plataformas si están listas para albergar la parte restante del duelo por internet».
En el vídeo, amplía sus impresiones: «En la primera partida jugué muy lento y mi tiempo iba muy rápido, quizás correctamente, quizás no. Es difícil de decir, ni pensé en ello, pero en la segunda partida lo que sucedió empezó a levantar dudas sobre la primera, porque el tiempo en mi monitor estaba muy mal. De hecho, los tiempos de los dos monitores eran muy diferentes».
«Desafortunadamente, no fue grabado, no sé por qué. Hay muchas cámaras, pero por algún motivo no grabaron exactamente los monitores. Por lo demás, la organización en general es perfecta». Kramnik se vio obligado a jugar rápido todo el tiempo, porque su reloj siempre estaba en 2 o 3 segundos, 5 como mucho. «Fue una tortura simplemente jugar, pero lo peor es que yo estaba haciendo muchos movimientos y al final tuve incluso 30 segundos, que era lo que mostraba el monitor de mi rival. El árbitro lo confirmó, pero en mi monitor siempre tuve 2-3 segundos. Por eso, por supuesto, yo jugaba muy rápido, lo que no tiene sentido».
El experto antitrampas, Yuri Garrett, confirmó lo que cuenta Kramnik. El error es extremadamente infrecuente, pero José Carlos Ibarra confirmó ayer que él mismo lo ha sufrido alguna vez. A Kramnik lo que más le sorprendía es que el error ocurriera solo en su ordenador. La conexión a internet era la misma para los dos y los ordenadores se estrenaron en este duelo, como él mismo había exigido.
«He jugado miles de partidas en Chess.com, pero nunca tuve este tipo de problema», añade Kramnik. «No tengo confianza total en esta plataforma. Definitivamente, mi declaración es que me gustaría continuar, estoy listo para jugar en el tablero y online, en cualquier formato, cualquier cantidad de partidas, pero si las partidas online se juegan en alguna otra plataforma, porque la experiencia de hoy fue terrible».
Luego, Kramnik se agarró a lo firmado para no seguir en estas condiciones: «Mi contrato dice muy claramente que deben dar condiciones iguales para cada jugador. No se hizo hoy, así que tengo mis dudas de qué hacer mañana». «Espero que los organizadores finalmente continúen con su evento en otra plataforma. No veo ningún otro camino». «Espero que resolvamos esta situación y que podamos continuar este duelo emocionante e interesante de manera profesional».
En la foto de arriba, Kramnik explica a los organizadores y los árbitros, en presencia de José Martínez, por qué no quieres seguir jugando en Chess.com. Foto: FMB / Damas y Reyes
Antes de marcharte, te quiero pedir un favor