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Después de decir en una entrevista que juega todos los días y que le gustaría enfrentarse a Magnus Carlsen, el futbolista del Liverpool recibe un saludo cómplice del noruego
El fútbol y al ajedrez se parecen más de lo que cabría imaginar, sobre todo en algunas manos y en algunos pies. Mo Salah, futbolista que juega en el Liverpool desde 2017, ha contado en una entrevista que le gusta el golf, deporte que practica a menudo, «no como un inglés auténtico, pero bastante bien para ser egipcio». Su verdadera pasión, sin embargo, es el ajedrez, del que se declara «un adicto». Bienvenido al club.
Si todo va bien, el vídeo empieza a reproducirse poco antes del minuto 4, cuando Salah empieza a hablar de ajedrez:
Salah, de 31 años, contó lo que hasta ahora era un secreto en una entrevista en el canal de televisión Sky Sports. El jugador desveló que juega «literalmente todos los días» por internet y que nadie le ha entrenado, pese a lo cual ya tiene un nivel de 1400 puntos Elo. Al entrevistador le sorprende el mecanismo de sentarse a jugar y enfrentarse a rivales al azar y Salah le explica cómo funcionan los portales. La FIDE, por cierto, tiene en sus registros a un ajedrecista egipcio llamado Mohamed Mohamed Salah, nacido en 1985 (siete años antes de lo debido) y con 1620 puntos Elo.
El futbolista no dice dónde juega, pero sí que usa su nombre seguido de algunos números, por lo que más de un contrincante le ha preguntado si era Mo Salah. «Les digo que sí y no se lo creen. Me responden que estoy mintiendo y entonces les digo: sí, estoy mintiendo», explica divertido.
¿Eres bueno?, le preguntan. «Soy bueno, no como Magnus, pero soy bueno», responde. «Nadie tiene ninguna oportunidad contra Magnus. Probablemente juguemos algún día». Aquí cabe destacar que el periodista sabe que se refiere a Magnus Carlsen, aunque luego confunde el Elo con la posición en la clasificación mundial.
El noruego no tardó en responder a la propuesta en las redes sociales. En X, envió una manita de saludo al egipcio, que ha tenido una difusión enorme, así que podemos confiar en que más pronto que tarde se celebre el estelar encuentro:
Carlsen, por otro lado, es también un gran aficionado al fútbol y a la Fantasy League, donde no solo llegó a ser líder. Este año, ha adaptado el formato al ajedrez y lo ha empezado a comercializar a través de su nueva empresa, Pawn, bajo el nombre de Fantasy Chess. También es un confeso admirador del Real Madrid.
Es curioso que Salan no mencionara que su compañero de equipo Trent Alexander-Arnold jugó una partida de exhibición contra Magnus en 2018. El británico solo resistió 17 movimientos, pese a que entrenó para el duelo «con ayuda de dos niños prodigio». «Ambos son juegos de estrategia y habilidad», explicó el futbolista. «Hay que saber cuándo y cómo atacar, mientras no pierdes de vista tu defensa. Las piezas, como los jugadores, tienen distintas posiciones y cualidades y necesitas saber cómo sacar el mejor partido de cada una para conseguir un buen resultado».
Hay muchos mas deportistas de élite aficionados al ajedrez, como vimos hace poco con la aparición de Carlos Alcaraz en Murcia. Toni Nadal también juega a menudo por internet y Pep Guardiola trabó incluso cierta amistad con Garry Kasparov. Quique Setién, Esteban Granero y Felix Magath son otros buenos jugadores de ajedrez y Diego Pablo Simeone no parece tan fino, por lo que vimos en una foto con uno de sus hijos, pero es otro que tampoco le hace esos a una partida.
Sobre la entrevista con Salah, el resto se juega ya sobre el césped, pero hay que valorar que le dedicaran un minuto y medio al ajedrez. De la charla se hicieron eco medios como ‘The Sun’, Chess.com y el diario deportivo ‘As’.